”Presentamos a Miguel Sanz Esteso, un reconocido montador de publicidad, que ha trabajado en la película “Diecisiete” del director Daniel Sánchez Arévalo que se presentó en el Festival de San Sebastián 2019.
Minibio
Nace en España en 1975. Estudia cine en el Centro Universitario de Artes de Madrid. Se dedica a la publicidad de reconocidas marcas y productoras de España. Trabaja con directores de gran talla como Daniel Sánchez Arévalo, Andy Fogwill, Rodrigo Cortés, Álex de la Iglesia, Isabel Coixet, Álvaro Brechner, Gabe Ibáñez, Maxi Blanco, Santiago Zannou, Paco Caballero, Emilio Martínez Lázaro, Agustín Díaz Yanes, Icíar Bollaín, Miguel Campaña, Pablo Robles, Lucas Shannon, Mehdi Norowzian, Agustín Alberdi y Benito Zambrano.
¿Qué tipo de película vamos a ver?
“Diecisiete” es una Road Movie a la Cántabra. Como la define Dani muy acertadamente, es una película de “media lágrima y media sonrisa”, una historia emotiva con un perro como eje central y Cantabria como escenario que da lugar a una aventura en la que dos hermanos terminan embarcados en un viaje que va complicándose a cada momento y alque van uniéndose nuevos personajes y elementos (una abuela terminal, un perro de tres patas…) que dan como resultado una serie de situaciones bastante peculiares. Todo ello mientras la relación entre los personajes va evolucionando.
¿Cómo te has incorporado a la película y cuánto tiempo has trabajado en el montaje?
Me incorporé al proyecto a la semana de empezar el rodaje para ir haciendo un primer armado en paralelo. Esta fase duró unos dos meses durante los que montaba solo y tras acabar el rodaje, ya junto al director trabajamos intensamente durante otros dos meses hasta tener un primer armado semi definitivo. A partir de ahí le dimos vueltas y vueltas como una peonza puliendo, sacando cosas, cambiando algunas otras y finalmente la dejamos unos días reposar para poder verla frescos (y en pantalla de cine) y hacer los últimos ajustes de montaje. Y terminamos porque teníamos que entregar, porque si por nosotros fuera, estaríamos revisándola.
¿Cómo ha sido el trabajo con este director?
Durante la primera fase del montaje estuve con mi fantástica ayudante Maria José Almela, que es una crack. Me ha facilitado infinitamente mi trabajo. Ya con Dani, trabajamos codo a codo la mayor parte del tiempo. Trabajar con él es una gozada, llevamos años hacienda cosas juntos y nos entendemos a la perfección, confiamos mucho el uno en el criterio del otro y la verdad es que nos lo pasamos muy bien montando. Lo más importante es que haya buena relación personal entre director y montador, si esa sintonía no se da, puede ser complicado sacar adelante el proyecto en condiciones. Es un proceso muy bonito, es muy placentero ver como va cogiendo forma todo lo que quieres contar. Nos hemos divertido un montón haciendo Diecisiete
¿Y qué otras relaciones te parecen fundamentales en esta película con otros departamentos?
Desde el montaje me parece fundamental la relación con VFX y el músico en particular. Cuando llevas dos meses montando la película con una música de referencia, al final te haces a ella y cualquier otra cosa que oigas te parece rara. Ahí es donde entra la genialidad del músico para proponer una visión nueva para contar también musicalmente la historia. Me parece un trabajo complicadísimo y me gusta participar en esa parte del proceso, ya que muchas intenciones en el montaje dependen directamente de la emoción que la música pueda aportar en ese momento.
¿Cuántas personas érais en el equipo de montaje?
Mientras se rodaba estuvimos solos mi ayudante y yo. Era la primera vez que trabajaba con ella y espero que podamos repetir. Durante el montaje con el director ya estuve yo solo.
SOBRE EL MONTAJE
¿Cómo se estructura el montaje de esta película?
Me ha resultado extraño ya que soy montador de publicidad y estoy acostumbrado a proyectos cuya duración en rara ocasión excede las dos semanas y enfrentarme a un proyecto de esta envergadura en el que iba a estar 5 meses me daba un poco de vértigo. Pero una vez metido en la rueda, hacerla girar fue muy placentero, poder estar centrado en un mismo proyecto tanto tiempo es un lujo.
¿Hubo una versión diferente de la peli que vamos a ver?
El primer armado lo hice respetando el guión original y salió un corte de algo más de dos horas. Pero después, montando siempre hay que tomar decisiones, como prescindir de ciertos elementos que te pueden dar matices a los personajes que prefieras obviar, o contra de otra manera ciertas situaciones. Y sobre todo, darle más ritmo y adaptarte a la duración final. Por ejemplo, la interpretación de Biel Montoro nos permitió prescindir de elementos que evidenciaban, en guión, la peculiar personalidad del personaje y que una vez en montaje, no eran necesarios. A veces, menos es más.
¿Crees que ha variado mucho respecto a ideas iniciales o guiones iniciales?
En esencia, la historia es la misma que Dani tenía en la cabeza pero limada y pulida para que los personajes y la historia quedasen más redondos.
¿Cómo te gusta abordar el trabajo de sonido?
Me parece fundamental el trabajo de sonido en el offline. Siempre voy armado con un banco de efectos y me gusta trabajar una banda de sonido lo más fina posible aunque sea de referencia. Cuanto más “terminado” podamos ver lo que llevamos montado, más fácil es hacerte una idea final. Y con la m.sica ni te cuento. Me obsesiona que ajuste como un guante y disfruto mucho creando emoción con ella, vistiendo la imagen como si fuera un traje a medida.
¿Has podido/querido participar en los procesos finales?
Una vez entregado el offline, he estado sobre todo pendiente del tema musical revisando con el director la banda sonora y proponiendo algún ajuste. A partir de ahí en el tema de imagen no he participado mucho más.
¿Nos puedes comentar algo sobre los aspectos técnicos de la película?
La película la montó en Adobe Premiere ya que era el software que más habituado estoy a usar ultimamente y me sentía muy cómodo trabajando con él. Y he de decir que funciona de maravilla. El mayor reto técnico fue en la descarga de material, ya que había que descargar diariamente lo que se había rodado el día anterior, pero todo fue como la seda.
Háblanos por favor de una secuencia que te emocione especialmente y por qué.
Hay una secuencia que tiene un significado especial para mi. Es una secuencia de montaje en la que Héctor hace amistad con un perro y se crea un vínculo entre ellos que da lugar a la trama de la película. En el momento de montar esa secuencia, mi perra Maia murió después de 15 años con ella. De hecho es quien más tiempo ha pasado conmigo en la sala de montaje que tengo en casa. Más que cualquier director. Y por casualidades de la vida, ocurrió justo al enfrentarme a esa secuencia con lo que te puedes imaginar lo que pude sentir montandola, lloré como una magdalena. Y cada vez que la veo se me revuelve algo dentro.
SOBRE EL MONTADOR
¿Te sueles implicar mucho en el montaje y cómo haces para sanear la cabeza?
Me implico mucho. Demasiado. En temporadas de intenso trabajo no paro ni un día durante semanas. No soy capaz de planificar nada con antelación en mi vida. De hecho no sé qué es eso de conciliar con la vida personal, a ver si lo aprendo algún día. Milagrosamente he conseguido formar una familia que me aguanta.
¿Sueles trabajar con la misma gente?
En el sector publicitario en el que me muevo monto habitualmente en las mismas productoras y el equipo suele ser el mismo en cada una de ellas de modo que acabamos siendo un poco como una familia.
¿Quiéres comentarnos algún nuevo proyecto?
Proyectos de publicidad unos cuantos, acabo de terminar la campaña mundial de navidad de Cocacola con la productora Landia y Maxi Blanco de Realizador. Tengo varios proyectos aprobados para el próximo mes, entre ellos uno con Rodrigo Cortés. Por otro lado, estoy barajando una propuesta de montar una serie de ficción. Ya veremos.
SOBRE “DIECISIETE”
Presentada fuera de concurso en el festival de cine de San Sebastián
DIRECTOR: Daniel Sánchez Arévalo
España
2019
https://www.youtube.com/watch?v=XiQS_nNdxoY