Diana García Jimenaayudante de montaje
Minibio
Licenciada en Comunicación Audiovisual en la Universidad Complutense de Madrid en 2007, comenzó su trayectoria profesional como auxiliar de montaje en la productora El Deseo en películas como La piel que habito o Los amantes pasajeros de Pedro Almodóvar. Más tarde participará como ayudante en el film Oro, dirigido por Agustín Díaz Yanes, así como en La virgen de Agosto de Jonás Trueba, Verónica de Paco Plaza o Quién te cantará de Carlos Vermut.
Su carrera no se centra únicamente en el cine ya que ha ejercido como ayudante en diversas series como Élite o Alta Mar de Netflix, premontado otras como Cuéntame cómo pasó o Fugitiva de TVE, y editado programas de televisión, vídeos corporativos, documentales y spots.
¿Cómo has llegado a trabajar en este rol? ¿Has desempeñado otros puestos?
Trabajé como auxiliar administrativo en El Deseo y allí tuve la oportunidad de empezar como auxiliar de montaje. Sí, también he premontado y editado series, spots, documentales y programas.
¿Cómo te has formado profesionalmente? ¿Piensas que en las universidades o centros de enseñanza se orienta bien el oficio de ayudante de montaje?
Me licencié en Comunicación Audiovisual y durante la carrera hice prácticas en Telemadrid y Televisión Española. A la vez realicé cursos de formación en edición y postproducción. Hay escuelas donde puedes especializarte en montaje, pero no sé hasta qué punto imparten ayudantía. En mi caso, me especialicé a través de optativas y cursos externos a la facultad. La carrera me sirvió para conocer otras disciplinas artísticas y distintos medios audiovisuales.
¿Por qué es importante la figura del ayudante en tu opinión?
Porque eres el responsable del material que llega al montador y a otros departamentos, como sonido, música y efectos.
¿Cuáles son las tareas de un ayudante?
Depende del medio, pero las comunes en todos suelen ser importar imagen y sonido, sincronizar y enviar materiales a postproducción (vídeo/audio de referencia, AAF, EDL, etc).
¿Qué otras tareas son responsabilidad del ayudante?
Preparar multicámaras, listados de VFX, transcodificar, enviar dailies, chequear conformado, editar avances, resúmenes, trailers, etc.
¿Varía mucho tu trabajo en función del proyecto?
Sí, cada medio y productora tiene unas necesidades. En series para televisión o plataformas digitales sincroniza el digitalizador. El ayudante envía materiales a dirección, postproducción, marketing…y hace otras funciones como documentación musical o realizar efectos de referencia. En cine siempre es labor del ayudante importar material, comprobar metadata de cámara y sonido, sincronizar y preparar secuencias por claquetas. También suele hacerse un cuaderno de montaje, donde se recogen y describen las tomas buenas de cada secuencia, un resumen del parte de script para el montador.
Una vez montada la película, se exporta el material por bobinas, para que toda la postproducción trabaje con 5 o 6 partes del film. En series se exporta por capítulos.
“Creo que en montaje hay un gran compañerismo, porque casi todos hemos empezado como meritorios, auxiliares o ayudantes y eso nos hace valorar a todo el equipo como lo importante que es, cada uno en su función. También se aprende mucho cuando hay más de un ayudante en el mismo proyecto, porque cada uno nos hemos enfrentado a distintas experiencias y a menudo hay una solución nueva que aprender de otro.”
¿Cómo es tu relación con los montadores? ¿Antiguamente entre montador y ayudante existía un vínculo de maestro/aprendiz, de enseñanza? ¿Crees que esto se está perdiendo?
Yo tuve la suerte de empezar con José Salcedo y Marta Velasco. Fueron grandes maestros para mí, muy generosos y además amigos.
El resto de montadores con los que he trabajado siempre me han enseñado.
Creo que en montaje hay un gran compañerismo, porque casi todos hemos empezado como meritorios, auxiliares o ayudantes y eso nos hace valorar a todo el equipo como lo importante que es, cada uno en su función. También se aprende mucho cuando hay más de un ayudante en el mismo proyecto, porque cada uno nos hemos enfrentado a distintas experiencias y a menudo hay una solución nueva que aprender de otro.
Lo que se pierde es el aprendizaje que podría tener el ayudante del proceso creativo del montador. Cuando yo he estado en esta fase, he disfrutado mucho del trabajo conjunto de director y montador, probando distintas ideas, o cuando se incorpora la música y la narrativa parece nueva.
¿Es un trabajo suficientemente reconocido?
En mi opinión no lo suficiente, por la responsabilidad que se tiene del material y por ser un puesto del que se prescinde cuando no hay presupuesto.
Desde hace años existe un híbrido de profesiones, por falta de presupuesto y/o de tiempo, especialmente en programas de televisión, donde el proceso de importar material es más rápido y, a la vez, se edita y se postproduce. Es otro tipo de producto que no tiene el tiempo de dedicación de la ficción, aunque te da otro aprendizaje como ser resolutivo. En este formato la figura de ayudante desaparece.
¿Trabajas siempre para la misma productora?
No, suele ser distinta en cada proyecto. Yo he trabajado para El Deseo, Apaches, Tandem Films, Bambú, Grupo Zeta, Grupo Ganga, Secuoya… Sí es cierto que sueles trabajar con la misma productora más de una vez, por cómo valoran el trabajo del montador productores y/o directores.
¿Cómo está el sector en cuanto a la situación laboral en la actualidad? ¿Consideras que es un trabajo en peligro frente a la necesidad de reducir presupuestos?
En cine es un puesto que se está reduciendo a preparar el material y, si hay poco presupuesto, ni eso. Lo que recae en más trabajo para el montador y menos tiempo para la creatividad.
Sin embargo, en las plataformas digitales, el ayudante es una figura muy necesaria por la cantidad de material que se envía y los tiempos de entrega.
Ojalá algunos productores vuelvan a darle el reconocimiento que nunca debió perder.